Blogia
becki

te amo

Te amo, es cierto. ¿no te parece bonito?

Decirte te quiero sería equivoco y confuso, incluso irreal. Sería mentirte y mentirme a mi misma. ¿Cómo voy a quererte? Y aunque te quisiera, cuando te tuviera, ¿Qué haría contigo?

Me amas, eso lo se.

Y me envuelves en ternura cuando el amor se torna físico entre tu y yo. Extrema confianza cuando nuestros imperfectos cuerpos se entrelazan transformandose en una perfecta comunión, una cadena de placidos instantes, un suspiro de placer…

 

Me despierto pensando en ti después de haberte soñado, sintiendo tu pensamiento en la más absoluta seguridad, por denso, y me recreo en la satisfación del momento buscando el sosiego y el motor que me impulsa a emprender un nuevo día con la sonrisa puesta…

 

…y el deseo…

 

Tengo tantas cosas por contarte!!! Todo eso que dices querer de mi; Todo.

 

Ambicioso, extraño, atrevido, paciente, frío, dulce…tranquilo…, a veces pienso que tu también me lo das todo y otras veces temo darte todo y quedarme sin nada.

 

…y el miedo…

 

Todo pasa, todo nace y todo muere, se tranforma,  incluso el miedo. Miedo a que te conviertas en algo importante en mi vida, miedo a la decepción o a la tristeza, a la añoranza o a la incomprensión. ¿Acaso crees que a “nosotros” no nos puede ocurrir?

 

Si, hoy estamos sorbiéndonos el alma por la boca y es fácil acostumbrarse a estos besos, ¿y si mañana me faltan? ¿y si los echo de menos? Te idealizo y gran parte de mi vida gira en torno a ti y me siento terriblemente asustada y tengo ganas de salir corriendo…

 

Irme a otros mundos y descubrir cosas nuevas. Vivir sin cadenas ni otro limite que el de la libertad ajena;

“haz lo que quieras mientras a nadie dañes”

 

 

                                            

 

Si vivirte fuera más fácil ¿Tendría tantas ganas de hacerlo?

Miénteme y dime que me quieres, que se que no me quieres, solo me amas.

 

                                                               

 

No tengo a otro, tengo a otros, y estoy bien con tanta abundancia que me cubre las ansias de comunicación constante. Siempre hay un hombro sobre el que llorar, un cuerpo para acariciar, un “colegui” para salir y alguien que me quita el sueño, pero todas estas caracteristicas no confluyen en un mismo ser. Formas parte del entramado en la importancia proporcional a tu presencia, y si bien ahora justamente tu eres quién siento más presente, no quiero relajar pensando en que serás eterno.

 

                                                                  

0 comentarios